La Cofradía de la Santa Vera Cruz continuó con sus actos de la Semana de Pasión y el viernes se vistió de silencio y dolor para acompañar la muerte de Cristo. Para la ocasión el Santo Sepulcro fue situado en mitad de la nave del templo y detrás, su madre de luto, fue también testigo del íntimo y emotivo acto que acogió el Convento: la proclamación de las siete palabras de Cristo.
El acompañamiento musical de una selección de músicos de la Agrupación Músico Cultural de la Santa Vera Cruz, propició crear un ambiente adecuado a la solemnidad de este culto. Además, la ermita del Convento estuvo abierta durante la Semana Santa en un amplio horario tanto de mañana como de tarde, para que los fieles y devotos pudieran acudir a visitar y rendir culto a los sagrados titulares de la Cofradía. Una cercanía de las imágenes con los cofrades que ha marcado toda la Semana Santa.