Los problemas de la presión en el agua podrían tener pronto una solución en Villafranco del Guadalhorce. La concentración de cal en las tuberías viene acarreando la disminución del caudal que discurre por tuberías desde el acuífero de la sierra de Alhaurín, que ya de por sí contiene una concentración de carbonato cálcico elevada. Ahora, el Ayuntamiento pone en marcha un nuevo sistema con el que se pretenden solventar estas complicaciones.
“Se trata de unos trabajos que hace ya algún tiempo venimos estudiando para acometer en todo lo que es el agua potable esta pedanía. Estos trabajos se suman al cambio de tubería integral recientemente terminado en calle María Auxiliadora, y ahora se está trabajando con una técnica nueva para la descalcificación de las tuberías”, adelanta Mª Inmaculada Fernández, concejala de Villafranco.
Estos trabajos de desincrustación de la cal se van a producir en las zonas en las que el abastecimiento tiene menos caudal, donde la tendencia es que la cal se incruste más de lo habitual en las tuberías.
Para estas mejoras se ha realizado un corte de varias horas en el suministro de agua en la calle Higuera, donde residen cuatro familias que han sido previamente informadas. Esta nueva técnica es la primera vez que se aplica en el municipio.
“Hemos encontrado una empresa que nos ha facilitado un producto a base de un ácido apto para agua potable. El procedimiento consiste introducirlo en tramos la red de abastecimiento, dejarlo tratar unas dos horas, y posteriormente enjuagarlo”, explica Javier Imbroda, ingeniero técnico industrial del Ayuntamiento.
Cada actuación ocupa cuatro horas aproximadamente. Con el primer tratamiento en esta calle se comprueba el resultado. Y se determina su ampliación a otras tuberías de la zona. “La verdad es que es un resultado bastante satisfactorio. Nos hemos dado cuenta que el grado de incrustación calcárea es superior al que inicialmente esperábamos, con lo cual vamos a repetir el tratamiento. Y lo haremos en casi todas las calles de la pedanía, con lo cual esperamos que para principios de verano esté aplicado el tratamiento en el mayor número de calles posibles para garantizar la calidad del suministro”, valora el técnico.
La intención del Ayuntamiento es continuar este plan en calles colindantes, y progresivamente ir ampliándolo hasta abarcar la totalidad del núcleo poblacional, llegando incluso a la opción de la sustitución de las propias tuberías por otras de mayor diámetro. En las siguientes calles donde se actúe, se irá informando a los vecinos previamente.
Desde el área técnica también se está estudiando actuar previamente en el depósito con un tratamiento específico para tratar de reducir al máximo las incrustaciones de cal.