El Ayuntamiento informa de cómo se va a proceder con el inicio del proceso de vacunación contra el coronavirus en Alhaurín el Grande, en función de las características de la población y los centros y servicios de los que dispone el municipio.
En el todo el distrito Málaga Guadalhorce se ha comenzado por el personal sanitario, trabajadores y residentes en las residencias de personas mayores, como recoge la Estrategia de Vacunación de Andalucía. Si no hay incidencias, se prevé que para mediados de enero todas las personas de las residencias y los centros sociosanitarios de la provincia hayan recibido ya la primera dosis de la vacuna, que tiene una efectividad del 95 por ciento, según los ensayos clínicos realizados. En el municipio no existe ningún centro de estas características, por lo que las primeras vacunas llegan en la siguiente fase. Serán entonces los sanitarios de UCI, ambulatorios y de los centros de salud, quienes se vacunen.
En tercer lugar, será el turno de los parasanitarios, donde entra el personal de farmacia y análisis clínico. Y en la cuarta fase de esta primera etapa de vacunas, entrarían otros dependientes y personas mayores, entre los que se encuentran los usuarios del Centro Fahala, del centro de estancia diurna Alhmer y otras personas con ese perfil por edad o dependencia que no hacen uso de estos centros, si bien esta la logística de esta parte está aún por concretar.
“Trasladar a la población que estén tranquilos, que la información se va a ir trasladando en la medida en que dispongamos de ella, que el Centro de Salud está montando el dispositivo para empezar a llamar a las personas en el momento en el que ya tengan las vacunas y estén autorizados, y pedir prudencia, que sigamos comportándonos como hasta ahora, porque hasta que no tengamos una inmunidad más grande con la vacuna, la forma de protegernos y de proteger a nuestros seres queridos es seguir haciendo lo que hemos hecho hasta ahora de forma bastante correcta”, señala Belén Vera, concejala de Sanidad.
Cómo es la vacuna que recibiremos
Poner la vacuna contra el coronavirus es más complejo que inyectar la de la gripe, por ejemplo, y se tarda más con cada persona que recibe la dosis. En primer lugar, hay que hacer una serie de preguntas en una encuesta y obtener el consentimiento del que va a ser vacunado; luego hay que preparar el líquido y, finalmente, inyectarlo. En todo ello se invierten unos siete minutos, por lo que cada hora se puede vacunar a unas ocho o nueve personas.
De ese trabajo se encargan tres enfermeros. Uno toma los datos del individuo en el ordenador; otro prepara la vacuna y el tercero la inyecta. De cada vial de la vacuna se obtienen cinco dosis. El líquido se mezcla con suero fisiológico y se inyecta. Para no desperdiciar ninguna dosis se procura que el número de personas que se vacunen cada día sea múltiplo de cinco.
21 días después de la primera dosis, las personas vacunadas recibirán una segunda, y entre una semana y 10 días más tarde se logaría la inmunidad. Las vacunas que se administran en el distrito sanitario Guadalhorce reciben el nombre comercial de COMIRNATY y han sido diseñadas en los laboratorios Pfizer. Llegan desde los ultra congeladores ubicados en Granada donde se distribuyen a toda Andalucía Oriental.
Aunque la vacunación es voluntaria, las autoridades sanitarias confían en que el volumen de personas que se pongan la vacuna sea elevado, puesto que de esa forma se logrará la llamada inmunidad de grupo o de rebaño. Para ello, es necesario que al menos se vacune el 70 por ciento de los ciudadanos.
La vacunación supone, según la evidencia científica actual, una actuación sanitaria beneficiosa tanto para la persona que la recibe como para la sociedad en su conjunto. La vacuna frente a la covid-19 reducirá el riesgo de una persona de enfermar, de desarrollar enfermedad grave y de morir. Sin embargo, las personas vacunadas deberán continuar adoptando las medidas preventivas para reducir la transmisión (lavado de manos, uso de mascarilla y distancia interpersonal).
Intentos de estafa
Por otra parte, desde la Concejalía de Sanidad se advierte a la población de supuestas llamadas que se están produciendo a personas con el pretexto de la vacunación y que en realidad son intentos de estafa.
“Desde que se ha empezado la vacunación se están haciendo eco los medios de comunicación de una serie de timos y de estafas, porque es cierto que estas circunstancias sacan lo mejor de mucha gente y lo peor de otra. Y hay personas que se están aprovechando de la vulnerabilidad, de la edad y de las ganas de adquirir la vacuna, y están llamando a las personas mayores para decir que van a ir a vacunarlos a las casas. Eso no es más que una excusa para intentar robar. No se hagan eco de estas llamadas, porque los tienen que llamar del propio centro de salud”, añade la edil.
En cuanto a la vuelta a clases tras las navidades, se informa que todo el personal docente de escuelas infantiles, colegios e institutos se someterá a pruebas PCR para detección de contagios.