XXXIII Noche Flamenca Villa de Alhaurín el Grande
Como todos los años, Alhaurín el Grande celebraba el pasado sábado su festival flamenco, la XXXIII Noche Flamenca, con un público, no solo de la localidad sino de otros municipios que abarrotó el patio del colegio Emilia Olivares y un elenco de artistas de gran nivel.
Un evento que cada año organizan las dos peñas de la localidad en colaboración con el Ayuntamiento. Diego Pérez, presidente de la Peña Unión Flamenca Alhaurina agradecía al numeroso público su asistencia informando que “el aforo se ha superado, estamos muy contentos de haber vendido todas las entradas”; de igual modo, daba las gracias al Ayuntamiento “por su colaboración en todo lo que ha hecho falta, y por seguir, con su aportación, impulsando y apoyando el flamenco en nuestra localidad”, a lo que le Juan Peña, presidente de la Peña el Hargahijo añadía “esta noche tenemos un cartel de gran nivel, con grandes artistas de renombre que nos harán pasar una estupenda noche flamenca”. Por último, la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Alhaurín el Grande, Mª Rosa Morales también agradecía a estas dos peñas su trabajo “por seguir impulsando el flamenco en nuestra localidad, por su intenso trabajo por seguir manteniendo nuestras tradiciones y nuestro arte, y por hacer que nuestra noche flamenca se haya convertido en un referente en toda la provincia”.
La XXXIII Noche Flamenca Villa de Alhaurín el Grande comenzaba con la actuación de la artista local Marina Badía, acompañada a la guitarra por Curro de María; una de las más esperadas por el público que arropó a la joven artistas con vítores y aplausos. Un gesto que esta cantaora agradecía con cariño: “Me he sentido muy contenta y emocionada por ver tantas muestras de cariño hacia mí, agradezco al pueblo de Alhaurín su cálida acogida”, decía Marina Badía.
La velada continuó con la fuerza de Pedro el Granaino y José de Pura a la guitarra, que supo trasmitir su arrojo al público asistente.
Continuó con la maestría en el baile de Rosi de Alva, que dejó ver el arte en pies y manos sobre las tablas del Emilia Olivares.
A Rosi, le siguió la delicadeza en la voz, y a la vez intensidad de Maite Martín que estuvo acompañada a la guitarra por Salvador Gutiérrez.
La noche la cerró la fuerza, juventud y frescura de Guillermo Cano, que, junto al guitarrista Paco Cruzado, supo intercalar el cante flamenco moderno con el más tradicional.
Todos se mostraron muy contentos con el público de Alhaurín, como coincidían todos en decir “su sentimiento hacia el flamenco, su respeto, su entrega y la gran atención hacia el artista”. Igualmente todos alababan la puesta en marcha de festivales flamencos de este tipo, como decía Rosi de Alva “Alhaurín trabaja y lucha por el flamenco, y eso es algo ejemplar”. En definitiva, una XXXIII Noche Flamenca Villa de Alhaurín el Grande que de nuevo ha sido un rotundo éxito tanto de público como de cartel. Sin duda, una estupenda forma de seguir fomentando e impulsando este arte tan nuestro.