Un grupo de profesionales sanitarios de Alhaurín el Grande, Marbella y Málaga forman parte de un proyecto de la Fundación Albihar que este verano va a desarrollar una labor humanitaria en Madagascar.
El objetivo se plantea para el término de Manakara, un pueblo de 44.000 habitantes en el litoral este de la isla, y surge dentro de iniciativa internacional.
“El proyecto consiste en ir a un dispensario médico, que va a ser una loneta y dos sillas, y nosotros tenemos que llevar absolutamente todo el material; y luego ir a la cárcel. El motivo de ir a estos dos sitios es porque hace tres años una fundación de Eslovenia organizada por gente malgache (gentilicio de Madagascar) vio cómo trabajábamos en un proyecto y nos llamó para ver si podíamos ir a Madagascar. íbamos a ir en 2020 pero no pudo ser por la pandemia, entonces hemos reactivado todo este proyecto ahora”, explica Silvia Montoro, médico de familia en el Centro de Salud de Alhaurín el Grande y una de las miembros que partirán en esta expedición.
El proyecto ha cambiado respecto a la idea inicial. En un principio, el planteamiento suponía el trabajar en un colegio en labores de salud infantil. Pero este mismo año se han producido dos ciclones que además de numerosos daños humanos y materiales, han empeorado la calidad higiénica y sanitaria para la población. Por lo que el objetivo se ha visto alterado.
“Nos han pedido que cambiemos totalmente el proyecto, y nos han pedido que montemos un pequeño dispensario, y recibir allí tanto a niños como adultos, dar clases de higiene, formar a dos personas que están allí para que cuando nos vayamos puedan hacer las labores propias que nosotros estábamos haciendo”, señala. Además del dispensario, también van a atender a población reclusa. “En la cárcel hay niños desde los 10 años que van por robar pan. Allí vamos a hacer salud infantil y salud de la mujer, porque también hay muchas mujeres en la cárcel porque, bien las encarcelan por acompañar a sus maridos o por delitos menores. Vamos a atenderlas sanitariamente”, asegura.
Los sanitarios recogen medicamentos para llevarlos hasta la isla, y piden colaboración ciudadana este sentido. Se puede donar desde Paracetamol, Ibuprofeno y Betadine, hasta vendas, gasas y esparadrapos, entre otros.
También solicitan dinero en metálico, por dos razones principales. “Primero porque hay medicación que solamente se puede comprar en el país, como por ejemplo contra la cólera, que en España no los tenemos. Y en segundo lugar, porque si surge alguna emergencia que tengamos que ir con algún paciente a algún hospital más cercano, necesitamos también dinero para atender a cualquier niño o adulto que requiera la atención hospitalaria, que no es otra cosa que una pequeña casa mata en la que puedan ser atendidos, y eso hay que pagarlo”, justifica.
Para colaborar con la causa, los donativos tanto monetarios como de medicamentos pueden realizarse en la consulta 2 del Centro de Salud hasta el próximo 11 de julio.